Solemos hacer las cosas porque creemos querer algo, pero muchas veces lo que supuestamente queremos tiene poco que ver con lo que en realidad deseamos.
Y tan solo se trata de un medio para conseguir nuestro verdadero fin (escondido), aunque no seamos conscientes de este proceso.
Como cuando nos ponemos a dieta, pero el verdadero objetivo no es tener unos kilos de menos, sino porque creemos que así será más fácil ser aceptados y conseguiremos que nos quieran (el verdadero deseo).
O cuando compramos un bolso o un coche de lujo, lo que en realidad buscamos es reconocimiento y estatus, que los demás nos respeten y nos aprecien.
No hay nada de malo en desear cosas, solo que no debemos confundir el deseo aparente con el motivo profundo que hay detrás de nuestras aspiraciones.
Porque en el fondo los seres humanos tenemos un pequeño número de necesidades universales fundamentales y todo lo que hacemos acaba llevándonos a ellas.
Además, si sabemos porqué queremos algo, podremos ir directamente a por ello, sin dar rodeos innecesarios.
BONUS
Para desvelar la intención oculta que hay detrás de algo que quieres haz este sencillo ejercicio:
- Pregúntate sucesivamente por qué lo quieres.
- Emplea la respuesta como enunciado de la siguiente pregunta.