Aunque cueste creerlo, los físicos aún no han determinado si existe UNA realidad objetiva.
Tal vez por eso los seres humanos creamos “modelos de realidad” que usamos como cartas de navegación para orientarnos por la vida.
El error que cometemos es confundir esos mapas con la realidad, por eso nos sorprendemos cuando sucede algo que se sale de nuestros modelos.
Un ejemplo claro de esto es la pandemia actual. Al inicio nadie era consciente de la envergadura de lo que nos venía encima porque no constaba en ninguno de los modelos que conocíamos.
Y cuando coloquialmente hablamos de ‘milagros’, nos referimos a algo que previamente quedaba fuera de nuestro paradigma habitual.
También tenemos modelos de realidad sobre nosotros mismos, de nuestras capacidades, de lo que nos ‘merecemos’, sin ser conscientes de que existen.
Pero podemos identificar nuestros valores, creencias y modelos, y actualizarlos si la ‘realidad’ que tenemos no coincide con la que queremos.
Con permiso de los físicos.